El sudor y la pérdida de electrolitos en los caballos
El sudor y la pérdida de electrolitos en caballos
El sudor y la pérdida de electrolitos en caballos
Inicialmente, es esencial conocer las características de los mejores caballos para competir.
Además de su velocidad, es vital considerar su resistencia y entrenamiento.
Por otro lado, algunos caballos tienen un linaje de campeones, lo que puede influir en su desempeño.
Sin embargo, no solo la genética juega un papel; el entrenamiento adecuado es crucial.
Por supuesto, la elección de un buen jinete también es determinante para el éxito.
Después de seleccionar el caballo ideal, es recomendable invertir en un buen equipo de competencia.
Mientras que algunos prefieren caballos jóvenes, otros buscan experiencia en la pista.
Finalmente, más allá de la competición, es esencial que el caballo y el jinete tengan una buena relación y conexión.
La producción de sudor va de la mano del ejercicio. Existen múltiples factores que determinan la cantidad de sudor que se pierde al realizar cualquier ejercicio, por ejemplo, el calor, la humedad y la intensidad del trabajo.
El ejercicio ligero con sudoración mínima puede inducir una pérdida de sudor de 1 a 4 litros, mientras que los caballos de alto rendimiento en el pico de esfuerzo pueden tener pérdidas de entre 12 a 18 litros.
Debido a la gran perdida de electrolitos con el sudor, la suplementación con electrolitos se convierte en un factor clave en el manejo de la dieta de los caballos que entrenan a diario.
La suplementación con electrolitos no es específica de la temporada. Los electrolitos bien formulados deben usarse siempre que los caballos suden a diario o casi a diario, sin importar la temporada.
Los caballos con concentraciones insuficientes de electrolitos en su cuerpo se cansan antes y, por lo tanto, tienen menos resistencia.
Sin electrolitos, el cuerpo no es capaz de mantener la cantidad adecuada de líquido dentro y alrededor de las células, y juegan también un papel clave en la transmisión de los impulsos nerviosos y la contracción muscular.
Los signos de una deshidratación severa son:
- Marcha irregular
- Contracciones musculares descoordinadas
- Temblores y debilidad muscular.