INICIOS DEL RODEO O JARIPEO EN MÉXICO

INICIOS DEL RODEO O JARIPEO EN MÉXICO

INICIOS DEL RODEO O JARIPEO EN MÉXICO

Inicialmente, es esencial conocer las características de los mejores caballos para competir.
Además de su velocidad, es vital considerar su resistencia y entrenamiento.
Por otro lado, algunos caballos tienen un linaje de campeones, lo que puede influir en su desempeño.
Sin embargo, no solo la genética juega un papel; el entrenamiento adecuado es crucial.
Por supuesto, la elección de un buen jinete también es determinante para el éxito.
Después de seleccionar el caballo ideal, es recomendable invertir en un buen equipo de competencia.
Mientras que algunos prefieren caballos jóvenes, otros buscan experiencia en la pista.
Finalmente, más allá de la competición, es esencial que el caballo y el jinete tengan una buena relación y conexión.

El “rodeo estilo americano” (como se le llama) ha sido bien asimilado por algunos estados del norte debido a la cercanía y convivencia con la frontera con Estados Unidos.

Todo parece indicar que esta práctica tiene origen en las faenas realizadas en las haciendas de la Nueva España para poder amansar caballos y arrear el ganado. En el norte del territorio novohispano se construyeron algunos corrales circulares conocidos como “El Rodeo”, donde se realizaban actividades para domar los animales. En ocasiones estas habilidades ganaderas se ejecutaban como muestra de destreza y distracción por los vaqueros con el nombre de jaripeo.

El jaripeo, actividad que se practicaba en gran parte del país, va adquiriendo particularidades regionales, adquiridas en Texas cuando se separa de México. Con el paso del tiempo, en el país vecino va adoptando características muy locales y algunas de las suertes del jaripeo son modificadas. Así nace el rodeo como deporte reglamentado que de a poco se extiende por el territorio norteamericano.

Aunque no hay documentos que lo avalen, es posible que a finales de la década de 1960 y a principios de la de 1970 se haya comenzado a promover el “rodeo americano” en el norte de México; sin embargo, se le agregaban algunas características del jaripeo, como la monta de caballo a dos manos.

Ya en las décadas de 1980 y 1990 algunas empresas realizaron en el centro del país, a manera de espectáculo, varios rodeos como el muy conocido de media noche en Santa Fe o la Compañía de Rodeos Cuernos Chuecos, que ha llevado a jinetes nacionales y extranjeros por los estados de México. En los últimos años se han formado asociaciones mexicanas de jinetes de monta, con lo que se ha pretendido regular y profesionalizar esta actividad.